Los estudiantes de Secundaria Básica del Instituto Regina Apostolorum situado en Rafael Calzada, partido de Almirante Brown, realizaron la promesa del cuidado de nuestra Casa Común
En el marco del día Mundial del Medio Ambiente, el pasado 5 de junio, los estudiantes de primero, segundo y tercer año de Secundaria Básica del Instituto Regina Apostolorum realizaron la promesa del cuidado del planeta. El acto estuvo a cargo de los profesores Agustina Jorge y Nicolás Ortolani y se llevó a cabo en el salón de actos de la mencionada institución. Además de los citados docentes, estuvieron acompañando a los estudiantes otros profesores y preceptores. El emotivo acto se celebró en el salón principal especialmente estuvo acondicionado y decorado para la ocasión:
hermosas carteleras invitaba a comprometerse con el cuidado de nuestra casa común y bellas plantas como obsequio final promovían la plantación de las mismas y por lo tanto el hábito de fomentar el contacto con la tierra, el cuidado de las plantas y del medio ambiente.
Luego del discurso formal, se presentó un divertido juego que imitó a un conocido programa de televisión (“100 argentinos dicen”), aunque en este caso se llamó “100 estudiantes dicen”. El juego presentó preguntas y respuestas referidas al cuidado del planeta que respondieron los propios estudiantes de Secundaria Básica. Todos los presentes participaron con entusiasmo. “Al principio todos estábamos charlando, un poco distraídos, pero después hicimos silencio, y escuchamos el saludo y el discurso”, dijo un estudiante de primer año. “Estaba todo re lindo presentado”, afirmó una alumna de segundo y luego agregó: “además, estuvo re divertido, la verdad que estuvo buenísimo lo del juego”. En ese mismo sentido un estudiante de tercero aseguró: “creo que aprendés más así, cuando es entretenido, le prestás más atención, estuvo muy bueno”. Todos coincidieron en que se trató de una verdadera fiesta donde la promesa pareció estar respaldada por un compromiso genuino y compartido.
Antes de finalizar el acto, los estudiantes recibieron un bello souvenir que consistió en una hermosa planta que cada uno plantaría luego en su casa como una forma real y también simbólica de comprometerse con el cuidado de nuestra casa común.
